MANGANESO-JÚPITER
MANGANESO
Descripción
Hoy sabemos que el oligoelemento manganeso juega un papel muy importante como antioxidante, evitando la formación de formas tóxicas de oxígeno. Se cree que puede desempeñar un papel en el proceso de envejecimiento degenerativo. El manganeso actúa como activador de numerosas enzimas necesarias para la utilización de colina, biotina, tiamina y ácido ascórbico. El manganeso es un catalizador en la síntesis de ácidos grasos, colesterol y mucopolisacáridos. También participa en la producción de proteínas, carbohidratos y grasas y es necesario para la regulación del azúcar en sangre. Entre las funciones del manganeso encontramos el bienestar del sistema nervioso y del cerebro, el mantenimiento de la producción de hormonas sexuales, el desarrollo normal del esqueleto, el buen funcionamiento del sistema inmunológico y la formación de sangre. El manganeso es importante en el tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro y para la utilización de tiamina y vitamina E. El manganeso es un elemento importante para la producción de leche materna, la formación de urea y colágeno. Es esencial para la formación de tiroxina, un componente de la tiroides. La protrombina y la vitamina K se forman con la ayuda del manganeso.
El manganeso está presente en pequeñas dosis en los huesos, la glándula pituitaria, el páncreas, la mucosa intestinal, el hígado y otros tejidos. Sólo se almacenan pequeñas cantidades a la vez con dosis máximas que oscilan entre 10 y 20 mg. El magnesio puede realizar algunas funciones en su lugar, ayudando así a mantener siempre reservas mínimas del mineral en el organismo.
Entre los alimentos más ricos en manganeso recordamos los cereales integrales, el aguacate, las algas, la yema de huevo, los frutos secos, las semillas, las legumbres, los arándanos, la piña, las espinacas, los guisantes secos y las verduras verdes. El contenido varía en relación a la cantidad de mineral presente en el suelo. Algo de manganeso se pierde en el proceso de refinar y moler los alimentos.
Asimilación y almacenamiento
El manganeso se absorbe a su paso por el intestino delgado. El cuerpo absorbe aproximadamente el 40% del manganeso ingerido. Una persona normal elimina cuatro miligramos de manganeso al día. Esta cantidad debe ser reemplazada.
La ingesta de grandes cantidades de calcio y fósforo en la dieta disminuye la tasa de absorción. La eliminación del manganeso se produce a través de las heces, principalmente en forma del complejo de colina de la bilis. El cuerpo de un individuo adulto contiene sólo de 10 a 20 miligramos de manganeso, que se concentra principalmente en los riñones, huesos, hígado, páncreas y glándula pituitaria.
Dosis y toxicidad
El Consejo Nacional de Investigación (EE.UU.) recomienda una ingesta diaria de manganeso que puede variar de 2 a 5 miligramos para adultos. En el caso de los niños, las dosis recomendadas son las siguientes: de 1 a 3 años, de 1 a 1,5 mg, de 4 a 6 años de 1,5 a 2 mg; de 7 a 10 años, de 2 a 3 mg. Los recién nacidos hasta los 6 meses deben tomar de 0,3 a 0,6 mg, y de 6 meses a 1 año, de 0,6 a 1 mg. Una dieta promedio contiene alrededor de 4 miligramos.
La ingesta de grandes cantidades de calcio y fósforo aumentará sus necesidades de manganeso. Dosis extremadamente altas de manganeso provocan una reducción del almacenamiento y uso del hierro y pueden provocar anemia por deficiencia de hierro. Este trastorno se puede tratar agregando hierro a la dieta.
Los trabajadores industriales expuestos frecuentemente al polvo de manganeso pueden absorber tal cantidad de metal en sus vías respiratorias que provoca síntomas de intoxicación. Una acumulación excesiva de manganeso en los tejidos puede manifestarse con debilidad, dificultades psicológicas y motoras, inestabilidad, anorexia, apatía, calambres en las piernas, migrañas, astenia, alteraciones pulmonares, dificultad para hablar, espasmos y rigidez musculares, ausencia de expresión, impotencia, Parkinson y enfermedades virales.
La administración de manganeso a pacientes ancianos con esquizofrenia, para reducir los niveles de cobre, puede provocar un aumento de la presión arterial. Tomar zinc normalizará la presión arterial. El aminoácido L-dopa se ha utilizado para tratar la intoxicación por manganeso.
Efectos y síntomas de la deficiencia.
Una deficiencia de manganeso puede perjudicar la tolerancia a la glucosa, que se manifiesta con la incapacidad de eliminar el exceso de azúcar en la sangre mediante oxidación y/o almacenamiento, provocando diabetes. Los niveles bajos de manganeso pueden causar aterosclerosis y desencadenar convulsiones en epilépticos. La discinesia tardía, una enfermedad neuromuscular, se puede tratar con la administración de manganeso y vitaminas del complejo B. La ataxia, una deficiencia en la coordinación muscular, se ha relacionado con una ingesta inadecuada de manganeso. Las deficiencias también pueden provocar parálisis, convulsiones y ceguera y sordera en los niños. En los adultos pueden producirse mareos, zumbidos en los oídos y pérdida de audición. En algunas pruebas realizadas con cobayas preñadas, los animales deficientes en manganeso mostraron una menor producción de leche materna y las crías tuvieron una menor tasa de supervivencia. También presentaban problemas de equilibrio debido al mal desarrollo del oído interno, convulsiones y ataques de tipo epiléptico. En los polluelos también se observó un crecimiento deficiente con patas y columna más cortas.
Efectos beneficiosos en las enfermedades.
El manganeso es necesario para el proceso reproductivo debido a su papel en la síntesis de colesterol, precursor de los esteroides sexuales. El manganeso también se utiliza en el tratamiento de la miastenia gravis (pérdida de coordinación y fuerza muscular). Algunos estudios realizados indican que el manganeso puede utilizarse en el tratamiento de la esclerosis múltiple. El manganeso ha dado resultados positivos en el tratamiento de la osteoartritis. Algunos estudios en animales han demostrado que el manganeso puede ser eficaz en el tratamiento de la diabetes. Combinado con vitaminas B, el manganeso ha ayudado a niños y adultos que padecían debilidad severa al estimular la transmisión de impulsos entre nervios y músculos. La misma combinación de nutrientes produce una intensa sensación de bienestar.
Muchos esquizofrénicos tienen niveles de cobre excesivamente altos. El manganeso, al igual que el zinc, ayuda a eliminar el cobre del organismo.
EL MANGANESO PUEDE SER EFICAZ EN EL TRATAMIENTO DE LAS SIGUIENTES ENFERMEDADES:
órganos | Enfermedades |
Cerebro/Sistema Nervioso | Depresión |
discinesia tardía | |
Trastornos neuromusculares | |
Epilepsia | |
Esclerosis múltiple | |
Esquizofrenia | |
Mareo | |
Orejas | Zumbidos en los oídos |
pérdida de audición | |
Musculatura | Coordinación muscular |
Debilidad | |
Miastenia gravis | |
Glándulas sexuales | esteroides |
Pulmones/Sistema respiratorio | Alergias |
Asma | |
Sangre/Sistema circulatorio | Diabetes |
General | Ataxia |
Osteoartritis | |
Cansancio |
- Ramanuja Das
- on Sep, 08, 2024
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